Baja por depresión: derechos, requisitos, cómo solicitarla y preguntas frecuentes

A diario nos encontramos con trabajadores que han sufrido algún tipo de depresión y como consecuencia, se han visto obligados a solicitar una baja laboral por depresión. En España cada vez encontramos más bajas de este tipo por motivos personales, familiares o laborales. La salud mental es tan o más importante que la física, es por ello que hay que conocer todos los aspectos de estas bajas. Veamos más detalladamente cómo funciona.

¿Qué es la baja por depresión?

La baja por depresión es un tipo de baja laboral que pueden sufrir los trabajadores cuando se encuentran de manera temporal incapacitados psicológicamente para ejercitar sus responsabilidades dentro de la empresa.

Al igual que el resto de bajas laborales, tiene que estar acreditada por un médico. Existen causas muy diversas que justifican una baja por depresión, no obstante, las más comunes suelen ser:

  • El estrés.
  • La ansiedad.
  • Problemas familiares o personales.
  • Conflictos laborales.

¿Puede ser privada o confidencial este tipo de baja?

No es obligado. La decisión de comunicar o no las causas de su baja la tiene el propio trabajador. El médico es la única persona que tiene que conocer las causas, dado que es él quien le concede la baja al trabajador.

Normalmente, el departamento de Recursos Humanos y el resto de la compañía suelen ser bastantes comprensivos ante estas situaciones. Sin embargo, si la baja se prolonga demasiado, probamente quieran conocer las causas.

¿En qué casos se puede pedir esta baja?

Normalmente, existen dos causas o contingencias generales por las que podemos solicitar una baja por depresión.

Contingencias comunes

Se da cuando la depresión se origina por causas ajenas a la actividad laboral. Suelen ser problemas familiares, personales o financieros.

En estos casos, es el médico de cabecera quien se encarga de acreditar la depresión y reconocer la baja que le corresponde al trabajador. No será hasta el cuarto día de la baja cuando el trabajador empiece a cobrarla. Se tendría que actuar como si se tratara de una baja por enfermedad común.

Por ejemplo: el fallecimiento de un ser querido o una enfermedad grave, entre otros.

Contingencias profesionales

Se da cuando el trabajador desarrolla la depresión por motivos relacionados con su actividad laboral en la empresa. Las principales causas de este tipo de baja por depresión suele ser el acoso laboral y el estrés.

En estos casos, se encarga la mutua de gestionar la incapacidad laboral y de sufragar la baja médica, que comenzará a abonarse al día siguiente de su reconocimiento.

Por ejemplo: el acoso laboral y una mala relación con los compañeros podrían ser las posibles causas de este tipo de baja por depresión.

¿Me pueden despedir estando de baja por depresión?

Te pueden despedir estando de baja, siempre que la causa que justifique el despido no sea el hecho de estar de baja. Si se despide al trabajador siendo el motivo la baja, se considerará despido improcedente.

¿Cuánto se cobra en la baja por depresión?

La retribución de una baja por depresión sigue los mismos criterios que cualquier otra incapacidad temporal. La Seguridad Social o la mutua se encargan de abonar la prestación que corresponde según el tipo de contingencia:

  • Los tres primeros días de baja no se percibe ninguna prestación por contingencias comunes, pero sí por las profesionales.
  • Entre el día 4 y el día 20 de baja, el trabajador percibirá una prestación equivalente al 60% de su base de cotización.
  • A partir del día 21 de baja, el trabajador recibirá el 75% de prestación, equivalente a su base de cotización.

Es posible que la cantidad que se perciba sea mayor si así es como lo contempla el convenio colectivo, pero nunca será inferior a estas cifras.

¿Quién paga la baja médica?

El empresario se tendrá que encargar de pagar lo que le correspondiera entre el día 4 y el 15 de baja, con la misma periodicidad que los salarios. A partir del día 16, la responsabilidad de pago será del INSS (Instituto Nacional de Seguridad Social) o de la mutua. Si es un trabajador por cuenta propia, el pago lo realizará directamente la entidad gestora o la mutua.

¿Cuánto puede durar la baja por depresión?

Según la legislación española, una baja por depresión puede durar doce meses consecutivas por trabajador. Sin embargo, si el médico de cabecera o el de la mutua consideran que concurren viarias causas que justifican la ampliación de la baja, esta puede prolongarse seis meses más.

Si después de este tiempo, el trabajador siguiera sin haberse recuperado de la depresión, se le remitiría a un Tribunal Médico para que acreditase su situación de incapacidad permanente.

Requisitos para solicitar la baja por depresión

Además de cumplir con alguno de los dos tipos de contingencias que se han nombrado anteriormente, también hay dos requisitos indispensables que hay que cumplir para poder acceder a la baja por depresión:

  1. El trabajador tiene que estar dado de alta en la Seguridad Social en el momento de solicitar la baja por depresión. En el caso de los autónomos, tienen que estar al día en el pago de sus cotizaciones sociales.
  2. En las contingencias comunes, el trabajador tiene que acreditar que ha cotizado a la Seguridad Social 180 días como mínimo en los últimos cinco años. En las contingencias profesiones, no existe requisito por lo que se refiere al periodo cotizado previamente.

¿Qué derechos tienen las personas con una baja por depresión?

Durante la baja, la única obligación real que tiene el trabajador es hacer todo lo posible para recuperarse. Esto significa que no tiene la obligación de contestar llamadas de teléfono, ni correos electrónicos, ni nada que tenga que ver con la empresa. Sobre todo, si la depresión tiene relación con el ámbito laboral porque podría ser contraproducente y podría evitar que el trabajador recuperase su salud.

Sin embargo, si la baja no tiene nada que ver con el trabajo, puede que sí que sea conveniente mantener algún tipo de contacto con los jefes y los compañeros, y así facilitar la reincorporación y continuar en contacto con las amistades.

Asimismo, el trabajador tiene derecho a recibir una compensación económica para poder cubrir la falta de ingresos durante el periodo de tiempo que se encuentre indispuesto para asistir al trabajo de manera temporal.

¿Qué se puede y qué no se puede hacer estando de baja?

En la gran mayoría de ocasiones, se considera que, si el trabajador necesita estar de baja, supone que no puede llevar un estilo de vida activo. Podría considerarse como fraude si se dedica a hacer gran actividad. Para evitar este tipo de conflictos, el médico debe autorizar qué puede y qué es lo que no puede hacer el trabajador. Veamos algunas dudas sobre actividades frecuentes:

Viajar mientras se está de baja por depresión. El trabajador tendrá permitido viajar si se acredita que puede ser bueno para su salud y que no supone ningún agravante. Se recomienda que el trabajador solicite un informe a su médico de cabecera en el que se constate que dicho viaje no supondrá ningún riesgo adicional para su salud.

Prepararse para un examen. Se supone que, en una situación de baja por depresión, el trabajador no dispone de la salud mental necesaria para desarrollar su actividad normal, todavía mucho menos para enfrentarse a la exigencia mental que podría suponer un examen. Esto puede despertar suspicacias en la empresa. Se recomienda también solicitar un informe médico. De todas maneras, se recuerda que la mayoría de oposiciones públicas no permiten la participación de aspirantes en situación de baja laboral por depresión.

Hacer deporte o salir con gente. Claramente son actividades que mejorarán la salud mental de la persona, aun así lo mejor es que el médico lo especifique o le preguntemos nosotros para asegurarnos. Se consideran actividades ensenciales que favorecen a la persona.

Desarrollar otra actividad económica. No es lícito iniciar otra actividad económica durante el periodo de baja. La empresa podría despedir al trabajador ante una situación como esta, ya que supondría el incumplimiento del principio de buena fe contractual. Además, el trabajador perdería la prestación por incapacidad temporal según lo previsto en el artículo 175 de la Ley General de la Seguridad Social.

Baja por depresión en contratos temporales y en período de prueba

¿Se puede despedir a un trabajador con contrato temporal en esta situación? La legislación sí que permite el despido del trabajador en ambos casos, siempre que se haya incluido en una cláusula específica en el contrato. Es una cláusula muy habitual en los contratos. Suele establecer que, en caso de incapacidad temporal, el contrato quede suspendido hasta la recuperación del trabajador.

En el caso de los contratos en periodo de prueba concretamente, la empresa solo tendría que comunicarle al empleado que no ha superado el periodo de prueba. El trabajador, en este caso, tendría la posibilidad de recurrir por considerar que la causa del despido ha sido la situación de baja. Esta acusación si se aprobase, podría suponer la improcedencia del despido e incluso, podría llegar a su nulidad.

María Gil

Es licenciada en Derecho en 2014 y tiene el Máster en Abogacía desde 2016. Por otra parte, trabaja desde 2015 redactando artículos en medios digitales y jurídicos. Dudaslegislativas le ha brindado la oportunidad de compaginar su vocación jurídica con la pasión por el mundo de Internet. Redes sociales: Twitter y Linkedin.