Desafortunadamente, muchas personas buscan molestar a otras, y para ello utilizan la libertad que les da el teléfono. Es decir, se sirven de llamadas, mensajes electrónicos, etc. para acosar a otras personas. Por ello, a continuación vamos a explicarte lo que debes saber sobre el acoso telefónico y qué debes hacer si lo sufres.
¿Qué es el acoso telefónico?
El acoso telefónico se produce cuando una persona se pone en contacto con otra por teléfono de manera insistente, normalmente profiriéndole amenazas, insultos, humillaciones o realizando cualquier tipo de conducta que menoscabe su integridad moral o haga ver que está en riesgo su integridad física.
Existen distintas formas de acosar por teléfono a una persona, que pueden ir desde manipular al otro sujeto a través de medios como aplicaciones de mensajería instantánea, hasta utilizar sus datos personales para causar un perjuicio, o extender el acoso hacia otras personas de su entorno para aumentar el daño causado.
Sin embargo, existe otra modalidad de acoso telefónico que ha cobrado fuerza en los últimos años, que es la insistencia por parte de ciertas compañías a la hora de llamar a clientes potenciales. Son muchas las personas que afirman sentirse realmente acosadas por estas prácticas. Lo que ocurre es que en estos casos, es más complicado que se pueda tratar de un delito, como veremos a continuación.
¿Se puede denunciar el acoso por teléfono?
Sí, se puede denunciar el acoso telefónico, en base al artículo 172 ter del Código Penal, que establece lo siguiente:
1. Será castigado con la pena de prisión de tres meses a dos años o multa de seis a veinticuatro meses el que acose a una persona llevando a cabo de forma insistente y reiterada, y sin estar legítimamente autorizado, alguna de las conductas siguientes y, de este modo, altere gravemente el desarrollo de su vida cotidiana:
1.ª La vigile, la persiga o busque su cercanía física.
2.ª Establezca o intente establecer contacto con ella a través de cualquier medio de comunicación, o por medio de terceras personas.
3.ª Mediante el uso indebido de sus datos personales, adquiera productos o mercancías, o contrate servicios, o haga que terceras personas se pongan en contacto con ella.
4.ª Atente contra su libertad o contra su patrimonio, o contra la libertad o patrimonio de otra persona próxima a ella.
En este caso, el quid de la cuestión radica en qué se entiende por “de forma insistente y reiterada” y “altere gravemente el desarrollo de su vida cotidiana”. Así pues, parece razonable entender que debe tratarse de una conducta que se repite con suficiente frecuencia como para entender que más allá de una mera molestia ocasional, está condicionando de alguna manera la vida de la persona afectada.
De ser así, se puede denunciar el acoso telefónico, para lo que resulta fundamental tener pruebas. Por lo tanto, es necesario no borrar el registro telefónico, los mensajes de WhatsApp o cualquier otra manifestación del acoso recibido.
¿Cómo se castiga el acoso telefónico? Multa y prisión
El tipo básico del delito de acoso se castiga con pena de prisión de 3 meses a 2 años, o multa de 6 a 24 meses. Las penas se agravan en los siguientes casos:
- Cuando la víctima es una persona especialmente vulnerable a causa de su edad, enfermedad y situación, en cuyo caso se prevé una pena de prisión de 6 meses a 2 años.
- Si la víctima es alguna de las personas contempladas en el artículo 173.2 del Código Penal (cónyuge, persona con la que se haya mantenido una relación amorosa, etc.), se contempla una pena de prisión de 1 a 2 años, o trabajo en beneficio de la comunidad de 60 a 120 días.
¿Qué hacer si sufres acoso por teléfono?
Nuestra recomendación es que si sufres acoso telefónico, lo denuncies para que el problema no vaya a más. Si la persona que te acosa ve que no haces nada, es posible que perciba tu temor y continúe acosándote, incluso en mayor medida. No hay que quitar subestimar la gravedad de este tipo de conductas.
Ahora bien, si lo consideras conveniente, puedes intentar seguir algunas pautas para intentar terminar con el acoso antes de llegar a la denuncia, que es una situación realmente desagradable. Puedes probar a hacer lo siguiente:
- No dar ningún tipo de respuesta a quien te acosa. Es lógico que muchas personas, ante una situación de acoso, no puedan quedarse calladas y entren a contestar al acosador. Sin embargo se trata de un error, ya que la otra persona sentirá que tiene el control y está consiguiendo su objetivo de molestar, por lo que puede empeorar su conducta.
- Bloquear a la persona que te acosa por todos los medios. Es fundamental también que bloquees a esa persona por todos los sitios que puedas: en las llamadas, en WhatsApp, en las redes sociales, etc.
- Cambiar de número de teléfono. Puede sonar injusto que la víctima tenga que cambiar de número de teléfono, pero en ocasiones puede ganar tranquilidad de este modo.
Ahora bien, es muy importante valorar la gravedad del problema antes de decidir no denunciar. Es decir, si es una persona a la que conoces bien y sabes que tiene el mal hábito de molestar por teléfono, pero no lo sientes como una amenaza más allá de esto, puedes probar con los consejos que te acabamos de dar.
O si se trata de una compañía que te trata de ofrecer un producto con insistencia, puedes intentar bloquear sus llamadas. Quizás insista con otro número, pero si lo bloqueas también, es probable que el problema se termine.
Sin embargo, siempre y cuando sientas que exista el más mínimo peligro para tu integridad física o moral, o la de tus allegados, no debes tener ninguna duda en interponer una denuncia para erradicar la situación y evitar que el problema se convierta en otro más grave. Como te hemos explicado, en este tipo de casos puedes denunciar la situación de acoso por la vía penal.